Beyoncé se vio obligada a detener su espectáculo en Houston el sábado por la noche cuando el automóvil en el que estaba sentada comenzó a inclinarse en el aire.
Por El Mundo
El elaborado escenario, un Cadillac rojo, está suspendido sobre cables y lleva a la superestrella por encima de sus fans cerca del final de su espectáculo en el estadio Cowboy Carter.
Pero durante la actuación del sábado, el coche comenzó a inclinarse lentamente hacia un lado, dejando a la artista de 43 años aferrada al asta de la bandera de EEUU para sostenerse, informa la BBC.
«¡Alto! ¡Alto, alto, alto, alto!», dijo Beyoncé, poniendo fin abrupto a su balada country, 16 Carriages.
Se pudieron escuchar gritos de la audiencia cuando sus seguidores se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo que fueron seguidos de aplausos cuando la estrella bajó lentamente al suelo, sonriendo y saludando a la multitud.
«Si alguna vez me caigo, sé que ustedes me atraparán», dijo más tarde.
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