Los gremios empresariales, desde su origen, se han consolidado como centros de opinión no solo en materia económica, sino también en asuntos sociales vinculados a las comunidades donde desarrollan sus actividades.
En múltiples localidades del país se evidencia cómo estos gremios, además de generar empleo, asumen un papel activo en plantear necesidades colectivas: vías de comunicación, hospitales, centros educativos, mejoras en los servicios públicos —especialmente agua y electricidad—, así como en temas relacionados con la seguridad ciudadana. Su vocería empresarial se mantiene atenta y solidaria frente a las problemáticas que afectan a su entorno inmediato.
Este compromiso no se limita a la creación y sostenimiento de puestos de trabajo. También se refleja en el respaldo al funcionamiento de los servicios municipales, gracias al cumplimiento de sus obligaciones tributarias, como el pago de patentes de industria y comercio, lo que constituye un aporte fundamental para preservar un ambiente limpio, seguro y con calidad de vida.
Por ello, se hace evidente que los gremios empresariales son voceros necesarios. No solo en la defensa de sus derechos económicos y ciudadanos, sino también en la exigencia de soluciones que garanticen el bienestar integral de las comunidades. Su papel resulta determinante para sostener la actividad económica privada, que a su vez se convierte en un pilar esencial de la calidad de vida de los habitantes.
Vicente Brito
Presidente
Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución.