Una bomba aérea lanzada por el Ejército ruso contra la ciudad ucraniana de Kramatorsk, cerca del frente y en la región oriental de Donetsk, ha matado a un niño de diez años, según denunció este martes en su cuenta de X la nueva primera ministra de Ucrania, Yulia Sviridenko.
La jefa de Gobierno condenó también el ataque con drones de largo alcance lanzado anoche por Rusia contra varias regiones ucranianas. “Otra noche de terror en toda Ucrania, Rusia continúa lanzando misiles y drones contra nuestra población civil”, dijo en X.
Sviridenko explicó que “edificios residenciales fueron atacados” en las regiones de Odesa y Sumi, en el sur y el noreste de Ucrania, respectivamente.
Según el parte de la Fuerza Aérea ucraniana, Rusia lanzó durante la pasada noche contra Ucrania un total de 42 drones de largo alcance, una cantidad mucho menor de la que ha sido habitual en las últimas semanas.
Pese a ello, 9 drones no han podido ser neutralizados y han impactado de forma directa en tres localizaciones distintas, según la Fuerza Aérea.
La primera ministra Sviridenko ha recordado que Ucrania está intensificando su producción propia de armamento para reforzar sus defensas aéreas.
Rusia y Ucrania siguen intercambiando todas las noches ataques contra sus respectivas retaguardias con drones de larga distancia con los que ambos bandos buscan destruir fábricas de armamento e infraestructuras militares del enemigo.
Ucrania pide un alto el fuego incondicional e inmediato de 30 días que Rusia ha rechazado por el momento. EFE