Además, la situación escaló cuando Sixto Rein, en lugar de abordar la controversia con un tono conciliador, aparentemente comenzó a hacer declaraciones amenazantes hacia Miami y sus residentes, lo que solo intensificó las tensiones. Este comportamiento ha llevado a una ola de rechazo aún mayor, con muchos pidiendo su repudio en los círculos de la diáspora venezolana y el boicot a su carrera artística. La situación sigue siendo un tema candente en las redes sociales, donde la indignación y el descontento no parecen disminuir.
La situación refleja las tensiones políticas y las divisiones entre los venezolanos que viven en el exterior, particularmente en torno a las figuras públicas que se aprovechan de sus vínculos con el gobierno de Maduro, y quieren aparentar que no lo están, de ahí parte la gran indignación de los venezolanos.