
Élder José Arteaga Hernández, conocido con el alias del Costeño, finalmente fue capturado por ser señalado como el cerebro detrás del atentado en contra de Miguel Uribe Turbay.
Por semana.com
El hombre se escondía de las autoridades desde que se cometió el crimen, pero cayó cuando se resguardaba en una casa ubicada en el barrio El Muelle, en la localidad de Engativá, en Bogotá.
Noticias Caracol reveló varios detalles de la audiencia en la que el sujeto, quien también es conocido con el alias de Chipi, fue enviado a prisión. Entre otras cosas, se conoció una segunda transacción que hizo pocos minutos antes de que se perpetrara el ataque, la cual lo dejó al descubierto.
En medio de la diligencia, la fiscal del caso detalló la vida criminal que durante muchos años construyó Arteaga Hernández, hasta que finalmente planeó y ejecutó el intento de asesinato en contra del militante del Centro Democrático.
La funcionaria precisó, tal y como lo han dicho los demás capturados, que el Costeño sabía desde un principio que el atentado tenía que ser cometido por un menor de edad. Por ello, finalmente contrató al presunto sicario de 14 años.
“Tenía que ser un menor porque así no iba a ir a juicio como adulto, sino que sería tratado en la jurisdicción de menores”, comentó.
Además, la fiscal también hizo referencia a la Glock 9 milímetros, arma usada para el crimen y la cual fue modificada para aumentar su letalidad, pues el objetivo era acabar con la vida de Uribe Turbay.
Pero hubo un detalle que llamó mucho más la atención y que ayudó a la identificación y caída del hombre: dos transferencias de Nequi que realizó poco antes del ataque.
La primera fue a un conductor de moto que, por medio de una aplicación de transporte, fue contratado para que recogiera al joven sicario y lo llevara hasta el barrio Modelia.
Este dato ya se conocía, pero hasta ahora no se sabía nada del segundo movimiento de dinero. Según la Fiscalía, el Costeño realizó otro pago por medio de Nequi de unos alimentos que el adolescente que disparó compró poco antes del atentado.
“El menor ingresó a un establecimiento comercial, en el cual compra un alimento y realiza el pago a través de la aplicación Nequi. La empleada del establecimiento toma una captura de pantalla del pago […] en la cual aparece que quien realiza el pago es Élder José Arteaga”, narró la fiscal.
Esta transacción, sumada a otros movimientos y pruebas recolectadas por los investigadores, ayudaron a determinar el papel principal que cumplió el Costeño en el crimen.
Todo apunta a que este sujeto fue contactado y contratado para que diseñara el plan con el que pretendían asesinar al precandidato presidencial. Al parecer, detrás de todo estaría la Segunda Marquetalia de las disidencias de las Farc.
Arteaga Hernández se encuentra recluido en el búnker de la Fiscalía General de la Nación, mientras que se adelanta el proceso en su contra y se sigue esclareciendo, poco a poco, cómo se dio el ataque que generó conmoción en todo el país.