
El líder norcoreano Kim Jong-un lució un reloj suizo de unos 14.000 dólares durante su visita a Pekín de esta semana, en otra muestra de ostentación pese a que Corea del Norte tiene prohibida la importación de bienes de lujo bajo sanciones de la ONU y a que su propio régimen castiga en casa las actitudes consideradas «burguesas».
En unas fotos publicadas por el Kremlin se puede ver a Kim luciendo un reloj IWC Schaffhausen Portofino Automatic y a su influyente hermana Kim Yo-jong portando un bolso negro de lujo Lady Dior valorado en unos 7.000 dólares, según informó el jueves portal especializado NK News.
Los Kim ya habían hecho gala de este tipo de artículos en ocasiones anteriores, a pesar de que su importación está prohibida por sanciones de la ONU.
Asimismo, la hija de Kim, conocida como Ju-ae, y la primera dama Ri Sol-ju fueron vistas portando lujosos bolsos Gucci en junio durante la apertura del résort turístico de Wonsan Kalma. Ju-ae, considerada la sucesora de Kim Jong-un, también fue vista con un reloj Cartier y otras prendas de alta gama.

De compras fuera y dentro de casa
El fenómeno se enmarca en un consumo creciente de lujo por parte de la élite norcoreana, incluidos relojes, cosméticos y bebidas alcohólicas.
En 2023, las importaciones de estos bienes desde China superó los 40 millones de dólares, según datos aduaneros de Pekín, citados por el legislador surcoreano Yoon Sang-hyun, creciendo exponencialmente frente a los tres años previos.
Empresarios norcoreanos viajan a ciudades chinas para comprar muebles europeos, televisores y artículos de moda, bebidas alcohólicas y cosméticos. A menudo reetiquetan los productos surcoreanos que compran como «hechos en China» para ocultar que su origen es del país «enemigo», según reportó en agosto el medio especializado Daily NK.
Pese a las sanciones internacionales, los funcionarios comerciales norcoreanos enviados al extranjero, sus esposas e incluso los trabajadores norcoreanos en el exterior pueden comprar artículos de lujo como bolsos y ropa y llevarlos directamente al país, dijo Jeong Eun-yi, investigadora del Instituto para Unificación Nacional de Corea en una entrevista para la emisora estatal KBS a finales de 2023.
Agregó que en China, la gente puede regalar este tipo de bienes a sus socios comerciales en Corea del Norte, lo que pone de relieve que los intercambios personales también sirven como vía de acceso a bolsos, ropa y otros productos de lujo occidentales prohibidos oficialmente.
Asimismo, en Corea del Norte existen grandes almacenes, como la Ryugyong Golden Plaza y Daesong Department Store, donde varios reportes muestran presencia de marcas desde Chanel hasta Rolex.

Pionyang muestra crecimiento, pero sigue entre los más pobres
La creciente cercanía con Rusia, la reciente mejora de relaciones con China, origen de cerca del 90 % de sus importaciones, y una mayor tolerancia a los mercados informales han dado alas a las élites económicas y a los nuevos ricos, llamados ‘donju’, que se benefician de la expansión de los mercados informales.
El Banco de Corea estimó la semana pasada que el PIB norcoreano creció un 3,7 % interanual en 2024, su mayor ritmo en ocho años, gracias al impulso del comercio con Rusia y a la normalización parcial de sus intercambios con China. Sin embargo, su ingreso nacional bruto (INB) equivale al 1,7 % del surcoreano.
El crecimiento continúa conviviendo con una grave escasez de alimentos y con la persecución estatal a los ciudadanos comunes que se atreven a imitar o consumir la cultura capitalista.
EFE