El presidente de la República, Gustavo Petro, arribó el domingo 29 de junio a Sevilla (España) donde tiene programado participar en la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FFD4) que convocó la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Por: Infobae
Como son varios los jefes de Estado los que están presentes en el país europeo, el rey Felipe VI de España y su esposa Letizia ofrecieron una cena en el histórico Palacio Real del Alcázar sevillano en una recepción protocolaria.
En la entrada del emblemático lugar estaban los monarcas ibéricos como anfitriones recibiendo a los mandatarios, y cuando llegó Petro saludó de mano al monarca ibérico y luego intentó darle un beso en la mejilla a la reina consorte, algo que no está permitido dentro de las normas para ese tipo de eventos con la realeza, por lo que Letizia rápidamente lo detuvo y mantuvo la debida distancia, saludándolo solo con un estrechón de manos, para luego hacerlo quedar en medio de la pareja real y tomarse la fotografía oficial del evento.
Por supuesto, en las redes sociales no perdonaron ese acercamiento, no protocolario, que muchos calificaron de ridículo internacional, y que, además, compararon con un traspié similar que protagonizó el fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez, durante una gira en Europa con la también fallecida reina Isabel II de Reino Unido.
Se trató de un viaje que realizó el otrora mandatario del hermano país en 2001, durante su primer periodo, y en ese recorrido llegó a Londres, donde se reunió en el palacio de Buckingham con la monarca británica, a la que luego de estrecharle la mano, le abrió los brazos para ofrecerle un abrazo, que ella rechazó y, como pasó con Letizia, mantuvo la debida distancia de Chávez, según recogieron de ese momento en el periódico El Espectador.
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