
El expresidente Pedro Castillo (2021-2022) afirmó este jueves que es víctima «de los dueños del Perú», por haber planteado durante su gobierno la elaboración de una nueva Constitución «del pueblo peruano».
«Yo recorrí todo el país y porque vine al Congreso y al Palacio (de Gobierno) con mi sombrero, como maestro, como campesino, acompañado de mi familia, de los más olvidados, eso no le gustó a los de arriba, a los dueños del Perú, y ustedes tienen que entender eso», señaló Castillo a los magistrados que lo enjuician por su fallido intento de golpe de Estado de diciembre de 2022.
El exmandatario tomó la palabra durante una audiencia del juicio oral que se le sigue por la presunta comisión del delito de rebelión.
Castillo, que se niega a reconocer la validez del proceso e incluso no ha acreditado abogados, por lo que es asistido por la defensa pública, se dirigió a los jueces para asegurarles que fue elegido gobernante «por más de 9 millones de peruanos».
Agregó que esto sucedió porque se «necesitaba la primera Constitución del pueblo peruano» y que él planteó que eso se concrete «a través de una Asamblea Constituyente».
«Por ese voto, los grupos de poder, los que me querían imponer una hoja de ruta, han hecho todo lo posible por tenerme acá, inventando que yo iba a quitarles sus bienes, que iba a implementar un gobierno comunista, ligado a Venezuela, a Cuba, cuando no es así», remarcó.
Tras decir a los jueces que tenían que «entender» la coyuntura política que enfrentó, les pidió que sigan el proceso en su contra «en cualquier espacio del pueblo».
«Yo sé que ustedes están metidos en su mundo de la legalidad, del derecho, pero me gustaría, en alguna oportunidad, con la fuerza del pueblo, caminar con ustedes, así, con su medalla, con su reloj, por cualquier espacio del pueblo. Me gustaría que me juzguen en cualquier lugar del país», sostuvo.
Castillo también aseguró que el proceso judicial que enfrenta ha afectado, principalmente, a sus padres y a su hija menor, y también le ha producido problemas de salud.
Añadió que una situación similar afronta su ex primera ministra, Betssy Chávez, quien también es procesada por este caso, y hacia quien expresó su «solidaridad» porque «está pasando por temas muy cruciales también», según dijo.
Desde el inicio de este juicio, Castillo asegura que la Fiscalía no ha podido confirmar que haya cometido el delito de rebelión por el que pide que se le condene a 34 años de prisión.
Hasta el momento, han declarado decenas de testigos, entre ellos exministros, congresistas, altos mandos militares y policiales, personal del Palacio de Gobierno y periodistas y directivos del canal estatal TV Perú, que retransmitió a nivel nacional el mensaje de Castillo.
El 7 de diciembre de 2022 el entonces gobernante anunció por televisión que pensaba disolver el Congreso, intervenir en la Judicatura y gobernar por decreto, en un mensaje que fue considerado golpista, tras lo cual fue destituido por el Congreso y detenido por la Policía Nacional.
EFE