
Una pediatra originaria de Oklahoma fue arrestada bajo cargos de asesinato en primer grado, luego de que las autoridades de Florida concluyeran que la muerte de su hija de cuatro años no fue un accidente, sino un homicidio presuntamente encubierto como un ahogamiento. La doctora Neha Gupta, de 36 años, fue detenida en Oklahoma City el pasado miércoles 2 de julio y se encuentra en proceso de ser extraditada al estado de Florida, informó el Departamento del Sheriff del Condado de Miami-Dade.
Por Infobae
Según un comunicado de prensa difundido ese mismo día, la detención de Gupta fue posible gracias a la colaboración entre la policía de Oklahoma City y el Servicio de Alguaciles de Estados Unidos (U.S. Marshals). Las autoridades la señalan como la presunta responsable de la muerte de su hija, Aria Talathi, de cuatro años, ocurrida en la madrugada del viernes 27 de junio en una vivienda de alquiler vacacional ubicada en la localidad de El Portal, en el área metropolitana de Miami.
La acusación sostiene que Gupta habría fingido que su hija se ahogó en la piscina del inmueble, pero una autopsia realizada dos días después reveló que el cuerpo no presentaba signos de inmersión, lo cual puso en entredicho la versión que la médica ofreció a los primeros respondientes. La investigación derivó en la emisión de una orden de arresto por el delito de homicidio en primer grado.
La doctora reportó un accidente en la alberca, pero la evidencia forense no la respalda
De acuerdo con la narrativa incluida en la orden de arresto y citada por PEOPLE y CBS News, Gupta relató a las autoridades que se encontraba dormida junto con su hija cuando escuchó un fuerte ruido hacia las 3:20 a.m. Afirmó que al despertarse, notó que la puerta corrediza de la habitación estaba abierta y, al salir al exterior, vio a su hija sumergida en el agua. Dijo que intentó sacarla, pero al no saber nadar, pidió auxilio a las 3:40 a.m.
Los servicios de emergencia que atendieron el reporte encontraron a la menor “sumergida en el extremo profundo de la piscina”, según el informe oficial. La niña fue trasladada al Hospital Jackson Memorial, donde fue declarada muerta a las 4:28 a.m.
Sin embargo, la autopsia practicada el 29 de junio cuestionó la versión de los hechos proporcionada por la madre. El informe médico-legal determinó que el cuerpo de la menor no contenía agua en los pulmones ni en el estómago, lo cual habría sido esperable en un caso de ahogamiento. Además, se detectaron lesiones dentro de la boca y hematomas en las mejillas que, según los peritos, no eran atribuibles a maniobras de resucitación.
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