Venezuela pasa por una opacidad de información a todo nivel. Obtener una cifra oficial es imposible, lo cual dificulta los análisis sociales, económicos y energéticos del desempeño de la nación, y la prospectiva de escenarios en el corto, mediano y largo plazo.
Sin embargo, los estudiosos se las ingenian para fabricar esas prospectivas mediante índices, ya bien sean nacionales o internacionales. Esos índices con la mejor información disponible y el juicio del experto, se logran construir valores que permiten conocer de una manera estadística la situación actual, y otear el futuro dentro de una rango alto de certeza.
Una de esas variables que tiene alta opacidad es el consumo de gasolina y diesel del parque automotor. No hay una fuente pública que ofrezca datos actualizados de dicho parque. Solo existen cifras agregadas, no actualizadas, como los reflejados en estudios y análisis de FAVENPA.
Para construir el modelo de estimación de consumo de gasolina y diesel, se tomaron valores de FAVENPA, así como índices del INTT e INE.
Los Valores del Modelo
El modelo, desarrollado en un EXCEL contempla los valores base para la estimación del consumo. Sin embargo, permite el cambio de esos valores, de manera tal que cada quien puede construir su propio escenario. A continuación, los valores con datos referenciales 2018 – 2022, los cuales fueron ajustados por el experto en el modelo.
Total parque automotor: 4.1 millones
Distribución por tipo:
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76% particulares
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16% transporte de carga
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4.8% motocicletas
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2% transporte público
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1.2% taxis
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Operatividad: Solo el 57% está operativo (2.33 millones)
Edad promedio: 22 años (50% tiene más de 15 años)
Combustible: 92% gasolina, 8% diésel
La estimación de la distribución por Estados, del parque automotor es la siguiente:
La tabla anterior, muestra una estimación del parque automotor venezolano discriminado por estado, basada en supuestos razonables y proporciones derivadas de población, actividad económica y densidad urbana.
Los parámetros utilizados para el cálculo de la estimación del consumo de combustibles líquidos, conjuntamente con la distribución del parque automotor por estado son:
Las gráficas a continuación muestran el estimado del consumo de diesel y gasolina por entidad federal.
Por otra parte, para efecto de darle más veracidad al modelo, se incorporó un estimado del consumo de diesel en el sector agropecuario, determinado mediante el siguiente EXCEL.
Venezuela | ||||
Estimación Consumo de Combustible Automotor (kBD) (2025) | ||||
Gasolina | Diesel | |||
Miranda | 15,0 | 4,5 | ||
Zulia | 13,5 | 4,1 | ||
Dto. Capital | 12,3 | 3,7 | ||
Carabobo | 11,4 | 3,4 | ||
Lara | 9,1 | 2,7 | ||
Aragua | 8,2 | 2,5 | ||
Bolívar | 7,3 | 2,2 | ||
Táchira | 6,2 | 1,9 | ||
Anzoátegui | 5,9 | 1,8 | ||
Falcón | 4,7 | 1,4 | ||
Mérida | 4,4 | 1,3 | ||
Sucre | 4,1 | 1,2 | ||
Monagas | 3,8 | 1,1 | ||
Barinas | 3,5 | 1,1 | ||
Portuguesa | 3,2 | 1,0 | ||
Nva. Esparta | 2,9 | 0,9 | ||
Trujillo | 1,4 | 0,4 | ||
Apure | 1,4 | 0,4 | ||
Yaracuy | 1,4 | 0,4 | ||
Cojedes | 1,4 | 0,4 | ||
Guárico | 1,4 | 0,4 | ||
La Guaira | 1,4 | 0,4 | ||
D. Amacuro | 1,4 | 0,4 | ||
Amazonas | 1,4 | 0,4 | ||
TOTAL | 126,4 | 38,0 |
Resumen
En el año 2025, el parque automotor venezolano proyecta un consumo total de 126.4 miles barriles diarios (kBD) de gasolina y 38.0 kBD de diésel, cifra que asciende a 65.4 kBD si se incorpora el sector agropecuario. Esta distribución territorial del consumo revela patrones críticos para la planificación energética, logística e industrial del país.
Hallazgos clave:
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Concentración de demanda: Las zonas metropolitanas y ejes industriales presentan los mayores niveles de consumo, destacando la necesidad de reforzar infraestructura de suministro y almacenamiento.
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Subestimación del diésel rural: La inclusión del consumo agropecuario modifica sustancialmente el perfil energético rural, evidenciando una brecha en la planificación tradicional.
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Visualización estratégica: El mapa de calor permite identificar nodos logísticos, cuellos de botella y oportunidades para transición energética localizada.
Implicaciones estratégicas:
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Infraestructura prioritaria: Estados con alta demanda deben ser considerados para inversiones en infraestructura modulares, centros de distribución y estaciones de carga alternativa.
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Transición energética focalizada: La electrificación del transporte debe considerar zonas de alto consumo como pilotos para movilidad sostenible.
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Modelos de negocio regionalizados: El consumo diferenciado abre espacio para esquemas público-privados adaptados a cada territorio, desde concesiones logísticas hasta hubs de innovación energética.
Aunque los valores de consumo mostrados siguen dentro del rango del “mejor estimado”, utilizarlos como base para escenarios de inversión, planes de contingencia y propuestas de transición energética, son de gran ayuda porque comunican: no solo volumen, sino también urgencia, oportunidad y dirección.
Nelson Hernández es ingeniero energistta @XXIenergía y académico de la Academia Nacional de Ingeniería y Hábitat de Venezuela