
Nicolás Maduro anunció este miércoles 10 de septiembre que la selección nacional de fútbol, la Vinotinto, debe someterse a una “reestructuración total” tras quedar eliminada de las eliminatorias al Mundial 2026. La declaración se produce luego de la derrota 6-3 ante Colombia, que dejó al equipo sin posibilidades de clasificación al repechaje.
Maduro expresó su respaldo a los futbolistas y al movimiento del fútbol venezolano, destacando la creciente popularidad de este deporte, que ha ganado terreno frente al béisbol en el país. En su discurso, señaló que el fútbol venezolano necesita una reorganización profunda para recuperar su competitividad. “Toda Venezuela exige una reestructuración del cuerpo técnico de la Vinotinto”, afirmó.
El líder chavista llamó a revisar la estrategia y redefinir la línea de trabajo del equipo, enfatizando la importancia de corregir errores para fortalecer el proyecto deportivo. Insistió en que el país debe mantener la esperanza en el potencial de los jugadores y en la capacidad de Venezuela para destacar en el escenario internacional.
“Levantar la cabeza, que el día de la Vinotinto llegará, y llegará de la mano de todos los futbolistas que hoy están creciendo”, expresó Maduro. Además, se presentó como portavoz de “millones de niños, niñas, jóvenes y de todo el pueblo” que confían en el futuro del fútbol venezolano, instando a no rendirse pese a la adversidad.
La eliminación de la Vinotinto ha generado críticas hacia el cuerpo técnico liderado por Fernando “Bocha” Batista, aunque la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre su continuidad. La reestructuración propuesta por Maduro pone presión sobre la FVF para definir los próximos pasos en la dirección del equipo.