Desde su retorno a la Casa Blanca, el gobierno de Donald Trump ha intensificado las políticas migratorias para frenar la entrada ilegal de extranjeros al país.
Por Semana
La implementación de nuevas estrategias, como redadas migratorias y la restricción de ingreso sin visa a ciudadanos de 12 países específicos, ha marcado el tono de su administración.
Sin embargo, según reportó La Nación el Gobierno ha dejado claro que aquellos inmigrantes que cuentan con sus documentos en regla no deben preocuparse.
En ese contexto, surge una herramienta alternativa para quienes desean emprender en Estados Unidos: el programa International Entrepreneur Parole Program (IEPPP, por sus siglas en inglés).
Aunque este beneficio no equivale a una visa oficial ni otorga residencia permanente, permite a ciertos extranjeros establecerse temporalmente en el país si demuestran que sus iniciativas empresariales tienen un alto potencial de crecimiento y pueden generar empleos significativos.
Es decir, se trata de una vía para que emprendedores con ideas innovadoras puedan trabajar y vivir legalmente en EE. UU., siempre que cumplan con requisitos rigurosos.
El solicitante debe ser dueño o tener al menos el 10 % de participación en una startup o empresa emergente establecida legalmente en territorio estadounidense.
Esta participación no puede caer por debajo del 5 % durante el tiempo de autorización inicial. Además, debe ocupar un rol activo y esencial en el funcionamiento de la empresa y tener capacidades comprobadas para fomentar su desarrollo.
La empresa vinculada debe haber sido fundada en los últimos cinco años, estar legalmente en operación, y no dedicarse a actividades financieras especulativas como el comercio de valores.
Asimismo, la compañía debe demostrar un claro potencial de crecimiento acelerado y generación de empleo dentro del país.
El programa fue creado oficialmente en enero de 2017 y comenzó a funcionar en julio del mismo año.
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