
(Fuente: Jakob Olling)
Esta semana, el Museo Nacional de Dinamarca y el Museo de Barcos Vikingos confirmaron el hallazgo de los buques Fridericus Quartus y Christianus Quintus, dos navieros negreros que en 1710 cumplieron la función de transportar esclavos desde África hasta Centroamérica. Luego de una ardua investigación, que demandó casi dos años, los científicos pudieron identificar su ubicación exacta y con ello cerrar el misterio de su paradero, que fue incierto por tres siglos.
Por: La Nación
La cultura esclavista entre los siglos XVIII y XIX tuvo un auge en ciertas monarquías, como la británica, la española, la portuguesa o la danesa. En ese período se transportó a seres humanos desde diferentes países africanos hasta América. Este tipo de comercio tuvo sus frutos más notables en el mar Caribe, sitio donde aparecieron los dos navíos escandinavos, específicamente frente al Parque Nacional Cahuita, en Costa Rica.
Pese a que durante dos siglos se especuló con que se trataban de restos de barcos piratas hundidos a poca profundidad, en 2015 arqueólogos marinos descendieron por primera vez para investigar la estructura naval. En su relato contaron que en un principio siguieron un camino de ladrillos amarillos que los condujo hasta ambas estructuras.
Esa información rápidamente llegó a Dinamarca, que cuenta con un registro de sus naves hundidas o desaparecidas durante el período del tráfico de esclavos. Fue recién en 2023 que el Museo Nacional de Dinamarca dispuso de buzos especializados para descender hasta el lecho marino con el fin de sustraer algunos fragmentos. En esa expedición tomaron muestras de varias pipas de arcilla, madera y ladrillos.
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