
Viajar con mucho dinero en efectivo hacia o desde Estados Unidos sin declararlo puede traer graves consecuencias. A partir de 2025, el gobierno federal endureció los controles sobre quienes ingresen o salgan del país con sumas no reportadas, permitiendo incluso la incautación inmediata del efectivo. Esta normativa rige en todos los aeropuertos internacionales del país y afecta tanto a ciudadanos, residentes como turistas.
Por El Tiempo
¿Cuál es el límite permitido?
Tal como lo aclara el Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) en su sitio web, “el límite legal para llevar sin declarar es de US$10.000”. A partir de esa cifra, es obligatorio completar el Formulario FinCEN 105, el cual puede presentarse:
En línea antes del vuelo,
Impreso en papel, o
Directamente ante un agente del CBP en el aeropuerto.
Si no se declara, “el CBP puede retener el dinero en el acto, sin necesidad de orden judicial”. Esto se debe a que “los aeropuertos son considerados puntos fronterizos, por eso hay más poder de fiscalización”, señala la CBP.
¿Cómo detectan el dinero?
Aunque portar efectivo no es ilegal, hacerlo en grandes cantidades sin declararlo activa protocolos especiales de control.
Según el bufete San Diego Defenders, la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) puede detectarlo mediante escáneres de rayos X o perros entrenados. Estos animales reaccionan ante “rastros mínimos de sustancias” presentes en muchos billetes de dólar.
Cuando detectan grandes sumas, “la TSA alerta a CBP, DEA o policía”, quienes pueden actuar de inmediato. En vuelos internacionales, el CBP tiene autoridad legal para inspeccionar y confiscar dinero sin orden judicial previa, ya que los aeropuertos se consideran zonas fronterizas.
Para seguir leyendo, clic AQUÍ.