La fragata multiusos de la Marina Real Holandesa Zr.Ms. Van Amstel (F831) atracó en Curazao entre las tensiones en el mar Caribe provocadas después del despliegue militar de Estados Unidos en contra del Cartel de los Soles frente a las costas de Venezuela.
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De acuerdo con datos del monitor de tránsito marítimo Marine Traffic, la fragata holandesa se instaló en el puerto de la bahía de Sint Annabaai el pasado jueves y actualmente sigue anclado allí.
La última visita documentada de esta nave de guerra al mar Caribe fue en abril de 2017, cuando su tripulación incautó casi 700 kilogramos de cocaína en dos redadas de drogas separadas entre Curazao y Colombia.
La fragata Zr.Ms. Van Amstel cuenta con un avanzado sistema de guerra electrónica y señuelos. En su armamento destacan su cañón OTO Melara de 76 mm, sus ocho misiles antibuque Harpoon y su sistema de lanzamiento vertical (VLS) Mark 48 de 16 celdas, con proyectiles Sea Sparrow.
A finales de agosto, el ministro de Defensa de Países Bajos, Ruben Brekelmans, señaló en una entrevista con Crónicas del Caribe que «si fuera necesario, podríamos enviar capacidades adicionales desde Europa».
Sin embargo, Brekelmans aclaró que «Países Bajos no está involucrado en el despliegue militar desarrollado por EEUU y, de momento, La Haya no tiene motivos para cambiar sus operaciones regulares en el Caribe».
