
Una celebración flotante en la Bahía de Biscayne, Florida, organizada por Telemundo para conmemorar el inicio de la cuenta regresiva hacia la Copa Mundial de la FIFA 2026, fue cancelada abruptamente el miércoles por la noche luego de una operación conjunta entre la Guardia Costera de Estados Unidos y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en la que participó un agente federal de inmigración.
Por Infobae
El evento, que se llevaba a cabo a bordo del barco turístico Barefoot Princess, reunió a representantes de la cadena Telemundo, funcionarios de la FIFA y la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava. La inspección, calificada oficialmente como “de rutina”, obligó a cancelar la celebración a la que asistían autoridades locales y figuras del entorno deportivo internacional.
“Desafortunadamente, en un momento en que nuestra comunidad debería haber estado celebrando, el evento tuvo que ser cancelado abruptamente debido a una operación conjunta con el Departamento de Seguridad Nacional y la Guardia Costera”, declaró la alcaldesa Levine Cava en un comunicado enviado a Newsweek. Añadió que no fue informada de antemano sobre la operación y que fue notificada por los organizadores cuando se tomó la decisión de suspender la fiesta.
La Guardia Costera asegura que la operación fue una inspección de rutina, no un control migratorio dirigido
Según la portavoz de la Guardia Costera del Distrito Siete, la teniente Nicolina Converso, la operación no tuvo como objetivo el evento ni a sus asistentes. En declaraciones al Miami Herald, Converso explicó que el procedimiento consistió en una inspección de seguridad durante la cual se levantaron citaciones por violaciones relacionadas con el funcionamiento de la embarcación, pero no se tomó ninguna otra acción.
Otra vocera de la institución, la suboficial Nicole Groll, afirmó que es política estándar de la Guardia Costera realizar verificaciones de antecedentes al personal de tripulación de embarcaciones comerciales y solicitar identificaciones. Cuando fue consultada sobre si los tripulantes fueron interrogados sobre su estatus migratorio, respondió que “no puede decir exactamente qué palabras se usaron”, pero reiteró que “esto no fue una operación dirigida por asuntos migratorios”, y que el objetivo era “asegurar que la embarcación operaba de manera legal y segura”.
No obstante, Newsweek reportó que algunos asistentes informaron que miembros de la tripulación fueron requeridos para mostrar identificaciones y documentación migratoria. Estas versiones fueron difundidas inicialmente por el activista Thomas Kennedy, integrante de la organización Florida Immigrant Coalition, quien publicó en redes sociales los testimonios recogidos tras la intervención.
Lea más en Infobae