
El expresidente colombiano Iván Duque (2018-2022) pidió este viernes a las autoridades electorales que impidan a su sucesor, Gustavo Petro, convocar una asamblea constituyente, al considerar que esta iniciativa representa un «abuso de poder» y «amenaza a las instituciones» del país.
«Es importante que la organización electoral le diga al ‘principito’ que él no puede incluir papeletas o tarjetones en las elecciones de 2026. No más ‘decretazos’, ‘cabildos’ y ‘constituyentes populares’ para amenazar a las instituciones», escribió Duque en su cuenta de X.
El exmandatario, del partido de derechas Centro Democrático, también afirmó que a Petro «ya le tocó agachar la cabeza con el Congreso y tuvo que aceptar las modificaciones que le introdujeron a la mal llamada ‘reforma laboral’, que en realidad es una ‘reforma pro sindical’».
«No más abusos de poder: las instituciones se hacen respetar», agregó Duque, horas después de que Petro anunciara que en las próximas elecciones legislativas de marzo de 2026 «será entregada una papeleta para convocar la asamblea constituyente».
Desde hace meses, el mandatario izquierdista, quien asumió el poder en agosto de 2022, ha planteado la posibilidad de convocar una asamblea constituyente argumentando que la Constitución vigente, de 1991, contempla un «Estado social de derecho», pero en su opinión algunos sectores políticos y magistrados de altas cortes siguen hablando del concepto de «Estado de derecho» presente en la Carta Magna de 1886.
Sin embargo, la propuesta es duramente criticada por distintos sectores que consideran innecesaria una reforma constitucional y que recuerdan que, según la propia Constitución de 1991, una asamblea constituyente solo puede proponerse mediante una ley aprobada por el Senado y la Cámara de Representantes.
Petro no ofreció más detalles sobre su iniciativa, pero este mismo viernes anunció que derogará el polémico decreto que convocaba a una consulta popular en agosto próximo sobre la reforma laboral de su gobierno.
El presidente había prometido retirar el llamado ‘decretazo’ si el Congreso aprobaba su proyecto para cambiar las leyes del trabajo en Colombia, tal y como sucedió esta mañana.
La medida sobre la consulta popular, sin embargo, ya había suspendida en los últimos días por el Consejo de Estado, el máximo tribunal administrativo, que consideró que para convocar al pueblo a las urnas se requería la autorización del Senado, que ya se había pronunciado en contra de la propuesta. EFE