
Drones ucranianos alcanzaron la pasada noche la terminal de carga de petróleo del puerto ruso de Primorsk, la más importante que tiene Rusia en el mar Báltico, que habría tenido que suspender sus operaciones debido al ataque, según dijeron fuentes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) a la agencia pública de noticias Ukrinform.
La terminal de Primorsk es un punto de carga clave de la llamada «flota fantasma» rusa, con las que Moscú sigue exportando petróleo en barcos con bandera de otros países pese a las sanciones occidentales en su contra.
Según cálculos del SBU, por el puerto de Primorsk pasan cada año unas 60 toneladas de petróleo que le suponen a Rusia beneficios de unos 15 mil millones de dólares.
Este ataque del SBU también ha sido confirmado por fuentes del servicio secreto a la publicación Kyiv Independent.
Según estas fuentes, el bombardeo provocó daños en un barco y en una estación de bombeo, lo que ha provocado la suspensión de las operaciones de carga. Según estimaciones del SBU, la interrupción del funcionamiento de la terminal le costará a Rusia unos 41 millones de dólares al día.
El gobernador de la región de Leningrado había informado previamente de un incendio en un barco y en una estación de bombeo del puerto de Primorsk por un ataque con drones ucranianos.
El puerto de Primorsk, en el golfo de Finlandia, se encuentra a unos mil kilómetros del punto más próximo de la frontera ucraniana.
Según las fuentes citadas por los medios ucranianos, drones del SBU también alcanzaron tres estaciones de bombeo que forman parte del oleoducto que lleva el crudo al puerto de Ust-Luga, que al igual que Primorsk está situado en la región rusa de Leningrado.
Ucrania ha golpeado repetidamente refinerías rusas con sus ataques nocturnos con drones. Según algunas estimaciones, los ataques ucranianos han destruido en torno al 20 % de la capacidad de refinación rusa.
Con estos ataques Kiev busca minar el suministro de combustible al Ejército, dañar la economía rusa y socavar la capacidad de financiación de la maquinaria de guerra rusa, que se nutre sobre todo de sus exportaciones de petróleo.
EFE