
La tripulación del guardacostas Mohawk regresó a su puerto base en Key West, Florida, el 29 de agosto, luego de una patrulla de seguridad fronteriza marítima de 75 días en el Paso de Barlovento, el Estrecho de Florida y el Mar Caribe.
Por Departamento de Defensa de EEUU
Durante la patrulla, la tripulación del Mohawk se desplegó en el área de responsabilidad del Distrito Sudeste de la Guardia Costera, donde llevaron a cabo operaciones de múltiples misiones con servicios conjuntos, socios internacionales e interinstitucionales para proteger las fronteras marítimas de Estados Unidos del tráfico ilegal de drogas y prevenir la migración ilegal de extranjeros en la región.

«Las recientes operaciones del Mohawk demuestran nuestro inquebrantable compromiso con la protección de los accesos marítimos de nuestra nación», declaró el comandante de la Guardia Costera Taylor Kellogg, comandante del Mohawk. «Nuestros esfuerzos durante los últimos 75 días han disuadido a las organizaciones criminales que buscan explotar nuestras vías fluviales y han reforzado nuestra dedicación a un entorno marítimo seguro. Estoy orgulloso de nuestra tripulación por su servicio desinteresado, su trabajo en equipo y su dedicación al deber».
La tripulación se desplegó inicialmente en apoyo de la Operación Centinela Vigilante durante una patrulla en el Paso de Barlovento para disuadir la migración ilegal de extranjeros a lo largo de la costa de Haití.
El 16 de agosto, la tripulación del Mohawk colaboró ??con la Fuerza de Defensa de Jamaica interceptando y transfiriendo una embarcación con cinco haitianos a bordo que intentaban entrar ilegalmente a Jamaica.

La tripulación también patrulló el Mar Caribe en apoyo de la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial Sur, cuya misión es detectar y monitorear cargamentos de drogas ilegales en el ámbito marítimo para su posterior interceptación y aprehensión.
Una tripulación aérea de la Marina identificó una embarcación sospechosa en el Mar Caribe el 21 de agosto, y una tripulación aérea de la Guardia Costera ayudó a rastrear la embarcación con tres presuntos traficantes de drogas a bordo.
Una vez alertado el Mohawk, la tripulación lanzó la lancha interceptora principal del cúter para una persecución de 113 millas náuticas. El equipo se coordinó con el personal de la Fuerza de Defensa de Jamaica, quien interceptó la embarcación en aguas jamaicanas.
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